DE LA CONVENIENCIA DE MANTENER LAS ALIANZAS PÚBLICO – PRIVADAS ENTRE LA ADMINISTRACIÓN MUNICIPAL, EL SECTOR EMPRESARIAL Y EL SECTOR SOCIAL DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
Por:
Luis Julián Salas Rodas
Sociólogo
Universidad Pontificia Bolivariana
Especialista y Magíster en Ciencias Sociales
Universidad de Antioquia
Magíster en Ciencias de la Educación
Universidad París XII
Universidad Pontificia Bolivariana
Especialista y Magíster en Ciencias Sociales
Universidad de Antioquia
Magíster en Ciencias de la Educación
Universidad París XII
luijus34@gmail.com
Blog en Google: ongcolombia.blogspot.com
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Twitter @LuisJulianSalas
Medellín – Colombia
- El Estado,
la empresa privada y el sector social.
El
renombrado profesor Salamon Lester, director del Centro de Estudios de la Sociedad Civil
de la Universidad John Hopkins de Estados Unidos plantea que para el buen funcionamiento de una democracia se
requiere la existencia de relaciones y vínculos
entre tres sectores: el Estado, la empresa privada y el sector social.
El Estado tiene a su cargo la defensa del
territorio, la garantía del respeto al orden constitucional, la legalidad, la gobernabilidad, la legitimidad, la
soberanía, el monopolio de las armas, la vigencia y garantía de los
Derechos Humanos y la prestación de bienes y servicios a la
población. Al sector empresarial le corresponde
la creación de la riqueza, los ingresos, los empleos y los bienes y
servicios para el mercado por parte de los grupos económicos y millones de
pequeñas y medianas empresas y negocios, así como el ejercicio público,
con recursos propios, de la Responsabilidad Social Empresarial RSE a las
comunidades rurales y urbanas. Al sector social le corresponde el poder de
la solidaridad, de la asociatividad y la cooperación. Conformado por miles de ONG, asociaciones,
corporaciones, fundaciones, organizaciones comunitarias, las iglesias, las
comunidades religiosas, las universidades y la comunidad en general. La
conjunción del sector empresarial y el sector social conforman la sociedad
civil. Mientras los funcionarios oficiales solo pueden hacer lo que la Ley
les permite, la ciudadanía puede hacer todo aquello que la Ley no le
prohíbe. Es esta una diferencia fundamental para entender los alcances y
límites entre el funcionamiento del Estado y la sociedad civil en la
construcción y mantenimiento de los Bienes Públicos. Y las relaciones y la
convergencia de los sectores se dan, en forma simultánea, entre el Estado
y el sector empresarial, entre el Estado y el sector social y entre este y
el sector empresarial. Como bien dice la Canciller alemana Angela Merkel:
“en una democracia todos debemos hacer las tareas que nos
corresponden”.
2. Acerca del sector empresarial. En Medellín según el Registro Público Mercantil a diciembre de 2018 había 102.569 empresas matriculadas y renovadas, con un total de activos de $510.5 billones. En el 2020 el municipio de Medellín recibió 1.16 billones de pesos por concepto del impuesto predial e industria y comercio. (www.medellín.gov.co). Así que las empresas contribuyen con el pago de sus impuestos al sostenimiento de la administración municipal y a la financiación de los programas de inversión social para la población de las comunas de Medellín. Y la existencia del sector empresarial colombiano no solo es importante para el sostenimiento del Estado y los entes territoriales, sino que también lo ha sido en el apoyo a iniciativas gubernamentales de beneficio común. En el caso de Medellín y de Antioquia hay muchos ejemplos para mostrar cómo fue, por ejemplo, Bancolombia que financió durante varios años la campaña ciudadana de la Cultura Metro, el apoyo técnico y financiero que recibió de la Fundación Empresarios por la Educación la Secretaría de Educación de Medellín para mejorar la calidad de la educación en las instituciones educativas públicas, la Fundación para el Progreso de Antioquia, Proantioquia, la Corporación Antioquia Presente, la Cooperativa Recuperar, Cornare, el Instituto para la Exportación y la Moda Inexmoda, el Centro de Tecnología de Antioquia, la Incubadora de Empresas de Base Tecnológica, el programa de fundaciones empresariales Entretodos, el Centro de Pensamiento Social, el programa Medellín Como Vamos y la Fundación Colfuturo, para otorgar becas- créditos para el estudio de maestrías y doctorados, tuvieron su origen y apoyo decidido del empresariado antioqueño. Mal hace el alcalde Quintero en estigmatizar a los empresarios y en desconocer el significativo aporte que durante décadas han realizado al desarrollo de la ciudad y el departamento en cumplimiento de su espíritu cívico y de los compromisos que impone asumir, en forma voluntaria, los principios de la Responsabilidad Social Empresarial RSE. Todas iniciativas y organizaciones que son la admiración de otras ciudades y departamentos del país.
- La
importancia de lo público y de las Políticas Públicas. Lo
Público es entendido como todo aquello a lo que la ciudadanía puede acceder y disfrutar sin ningún
tipo de restricciones, como una calle, un parque, una plaza, la seguridad, un medio ambiente sano y limpio, la
información, la justicia, las redes sociales. Cuando en la sociedad surgen problemas que la afectan
corresponde al Estado y a sus entes territoriales, departamentos,
distritos y municipios liderar, formular e implementar, con la inclusión y
la participación activa de los colectivos poblacionales y la ciudadanía,
Políticas Públicas que atiendan a la solución real de sus problemas.
Políticas Públicas como Buen
Comienzo y la Política Pública de Familia de Medellín, fruto del
trabajo conjunto, durante varios años, entre la administración municipal,
el Concejo Municipal, las universidades, las iglesias y las ONG de familia
de la ciudad. Medellín es un reconocido
referente nacional en cuanto al diseño y concreción de una Política
Pública para las familias. La sociedad civil debe permanecer siempre
alerta y denunciar cuando se presenten
hechos de cooptación del Estado por interés de privatizar lo publicó.
- La
importancia de las alianzas público - privadas APP. Las alianzas público-privadas APP son otro medio de
construir Bienes Públicos para el bienestar de la sociedad. Para el Banco
Mundial una alianza es una relación abierta entre socios distintos, que se
unen para hacer aportes diversos pero complementarios con el propósito de
alcanzar un objetivo común acordado por todos. El valor de la confianza
mutua entre los socios es fundamental para la pervivencia de la alianza en
el tiempo. Las APP no son contrataciones que suscriben entidades de la
sociedad civil con el Estado. Como ha dicho el exalcalde de Bogotá Antanas
Mockus; "en una alianza todos
ponen”. Un alcalde que participe de una alianza entre sectores no implica
que pueda trasladar su autoridad y poder a los otros socios de la alianza.
Las alianzas cuando se afianzan y consolidan adquieren relevancia
económica, social y política para el desarrollo de la población y los
territorios. Ejemplos de alianzas público – privadas exitosas en la ciudad
son la creación de organizaciones como: el Parque Arví, el Parque Explora
y Ruta N, una apuesta para la ciencia, la tecnología y la innovación.
- Preguntas de
la ciudadanía al señor alcalde. La ciudad
de Medellín es el resultado de la
construcción colectiva de la CONFIANZA, de los esfuerzos, de los
impuestos, de los aportes, voluntarios del sector empresarial y social, de
las acertadas Políticas Públicas, de las alianzas público-privadas, y de
la conformación de un valioso capital social, cívico e institucional de
todos los sectores y NO ÚNICAMENTE de los recursos económicos, los planes
de desarrollo, la voluntad política o la
gestión de las administraciones municipales y del Concejo Municipal. Por sus declaraciones públicas y sus
decisiones el alcalde Quintero quiere desistir de continuar en esta
dirección de cooperación, alianza, y trabajo mancomunado con el sector
empresarial y el sector social. Ha dicho que: “Medellín ya no les
pertenece”. ¿Con el debido respeto señor alcalde quisiéramos saber a quien
o quienes ha dejado de pertenecer Medellín? ¿A quién o quiénes les
pertenece ahora la ciudad? ¿Cuáles
son, ahora, sus “dueños”, sus nombres, orígenes, y probidad? ¿Están
dispuestas esas personas u organizaciones a trabajar en alianza con su
administración, en participar en la formulación e implementación de
Políticas Públicas, en proponer y construir nuevos Bienes Públicos? Y la
respuesta que también quisiéramos escuchar de sus labios es: ¿puede la alcaldía de Medellín a su
cargo, ser el único actor social y político que represente los intereses y
bienes públicos de la ciudad? Solo con la unión, las alianzas y la
convergencia colectiva en objetivos comunes entre el Estado y la sociedad
civil es como podemos afrontar con éxito
los problemas y las amenazas que se presentan para el adecuado desarrollo
y la convivencia pacífica y democrática de la ciudad. Un ejemplo de ello
fue el ataque y reto frontal que las fuerzas del narcotráfico impusieron a
la ciudad en las décadas de los años 80 y 90 del pasado siglo. Fue con el concurso del Gobierno Nacional, mediante la
Consejería Presidencial, las sucesivas administraciones municipales, el
apoyo del sector empresarial, la intervención de las organizaciones del sector
social y la participación de las mismas comunidades afectadas por los
hechos de violencia, como pasamos del “miedo a la esperanza". Y otro ejemplo reciente ha sido el evento de la
pandemia global del COVID 19. Si no es con el concurso, con la colaboración
de toda la ciudadanía, de las familias, de las comunidades y las entidades
tanto públicas como privadas no hubiese sido posible estar combatiendo
la pandemia y mitigando sus perniciosos efectos sobre la vida y la salud
pública de los habitantes de la ciudad. Es de anotar que entre la
Fundación Fraternidad Medellín y las fundaciones del Grupo Empresarial
Antioqueño GEA aportaron 16.800 mil millones de pesos para compra de
insumos y aparatos médicos para dotar a las Unidades de Cuidados
Intensivos, UCI, de la ciudad.
- Un nuevo
pacto social entre los sectores de la ciudad y la administración
municipal. Con seguridad, en
el pasado se cometieron graves errores, se
subvaloraron o ignoraron problemas sociales de las comunidades, se dejaron
de atender urgentes necesidades materiales y se dejó coger ventaja de a la
delincuencia organizada. Todos
asuntos posibles de corregir, afrontar y superar entre todos en el
presente y el futuro. Señor
alcalde, aun le restan a usted y a su equipo de trabajo casi tres años de
mandato para reflexionar, dejar el tono desafiante y descalificador, para no
seguir estigmatizando a grupos y sectores, restablecer el diálogo y la confianza deteriorada con la sociedad civil, para
volver al pacto social, y ser con propiedad el alcalde de todos y todas
los ciudadanos y ciudadanas de Medellín y no solo de algunos colectivos o
de sus votantes. Es usted señor alcalde quien decide, en su libre
albedrío, como es que quiere ser recordado por el bien de la ciudadanía de
Medellín, del departamento y del país una vez termine su mandato como
alcalde en el 2023.
Luis Julián Salas Rodas
Medellín, 1 de febrero de 2022